En la fotografía se observa el puente del archipiélago de San Simón, que une las islas de San Simón y San Antonio. Se trata de una obra realizada por el arquitecto e ingeniero de caminos Alejo Andrade Yáñez y en ella se pueden contemplar tres arcos soportando la monumental estructura que, como el resto de muros y muelles de las dos islas, descubren un imponente trabajo de cantería. San Simón acogió el lazareto atlántico, inaugurado en 1842, si bien las obras de ampliación continuaron hasta 1849. En la actualidad aún se conservan algunos de los edificios primitivos que incorporaron la vanguardista arquitectura hospitalaria francesa de finales del siglo XVIII y parte del paisaje vegetal, que por entonces se inspiraba en los ideales de los jardines románticos, donde destaca el hermoso y espectacular Paseo dos Buxos.
Le pone música a la postal Paulina Ceremuzynska, quien canta a Meendinho (siglo XIII) interpretando “Sediam’ eu na ermida de San Simion” sobre la melodía del ofertorio gregoriano «De profundis clamavi ad te Domine”. La artista se inspiró en esta música sacra porque, tal vez, era conocida por Meendinho. Con esta idea, Paulina Ceremuzynska subraya la doble dimensión de la cantiga, donde la mujer que canta puede ser una joven o un espíritu.